Habito en los silencios incómodos. No pienso decir nada, alargaré este momento todo cuanto sea capaz, hasta que no puedas aguantar más y lo rompas con algún comentario trivial. Crees que te devuelvo la sonrisa, pero no es por compromiso. Estoy disfrutando.
Me alimento de las risillas nerviosas. Esperas que conteste, pero absorbo tus palabras sin devolverte más que un gesto vago, conforme. Te encoges de hombros, miras tus manos. Siguen en su sitio. Se te acaba el ritual de gestos de relleno. Me miras de nuevo y me diriges un gesto afirmativo. Sí, aquí estamos. Ni me muevo, sigue siendo tu turno. Todo tuyo.
Los titubeos me excitan de forma inimaginable. Desvias la mirada y finges dirigirla a algo que súbitamente requiere toda tu atención. Confundes mi serenidad, ignoras que mi ritmo cardíaco supera al tuyo con creces. Cuando oigo tu suspiro, cercano a la desesperación, sólo me falta jadear.
Sunday, November 18, 2007
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2 comments:
haleeee! Otro! Yuppi! Te echaba de menos a ti, a tus post en idioma entendible para mi incapacidad.
Vale,ignórame,si eso te pone.jaja.
Besos, Alba
(Se te quiere, lo sabes, no?)
Para compensar. Ayer que tuve un ratito recuperé los que tenía empezados y ya medio acabados.
Gracias, preciosa.
Besos
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